El ingenio filosófico

Algunos de los que hemos decidido tener en la filosofía tanto la fuente de trabajo, entretenimiento y forma de vida, estarán de acuerdo conmigo en que a veces envidiamos la valentía intelectual con la que nuestros alumnos son capaces de defender filosóficamente un punto de vista. Nos muestran que con una idea bien fundamentada e ingenio argumentativo se obtiene un texto interesante de leer. Basta sólo que como lectores estemos dispuestos a dialogar con los escritos, y pensar problemas de suma importancia. Espero poder trasmitir la emoción que me causó leer los ensayos aquí publicados. Invito al lector a prepararse a filosofar y preparar sus mejores argumentos para la discusión.
En “Eutanasia como libertad”, Cristian Daniel identifica una contradicción que nos determina en nuestra libertad, a saber, la manera en la que nos educan. Por lo tanto, debemos cambiar el discurso educativo. Si esto se cumple, entonces, podríamos notar que la muerte es quizá el suceso más importante de la vida y, así, Daniel sostiene que la eutanasia es la mayor expresión de libertad. En otro ensayo, “Paridad de género en la educación”, Andrea Leticia nos ofrece un panorama general del problema de las diferencias y consecuencias de las diferencias de género. La tesis que Andrea defiende aquí es que, por medio de la educación, podemos cambiar el paradigma que determina nuestra manera de entender los géneros a partir de las habilidades y no hacerlos pelear como si de una competencia se tratase.
También encontramos en “La eutanasia, ‘derecho a no morir’”, que Stephanie Rivera sostiene que cuando pensamos en el fenómeno de la eutanasia como problema, parece que inevitablemente llegamos al punto de estar a favor o en contra; propone que, si ese es lo que pasa necesariamente, entonces, debemos entender el problema para tenerlo claro y así poder discutir sobre ello. Por último, en “Equidad, ¿por qué?”, Karla Jiménez habla sobre el problema de la equidad de género realizando distinciones filosóficas sobre cómo abordar el problema, dentro de las cuales destaco el concepto de “sociedad discapacitada; hace referencia a la incapacidad social de entender la equidad de derechos. La tesis que defiende Karla es contundente: lo primordial a buscar no es la equidad de género, sino la equidad social, si conseguimos esta última, inevitablemente tendremos la de género.

Dorian Hernández Vázquez*


 
* Licenciado en filosofía y maestro en estudios filosóficos por la Universidad de Guadalajara, es profesor en la Preparatoria de Tonalá desde 2015. Imparte las asignaturas de filosofía y ética, así como la de comprensión de la ciencia.