I
Sordo:
Violines al viento
en melancolía inversa a los juncos “suenan”
Mudo:
Has callado para otorgar el habla
al lamento del humano roto
luto nebuloso;
escombros de pelusa
polvo de ocaso,
caída azul…
¿Un sepelio para el sol?
Lágrimas de galaxia
tejen relatos con hilos de estrellas,
grillos en vela
cantan historias en fogatas cometas
¿Sera la caída de la luz nuestra lucha eterna?
II
Somnolencia rutinaria de un astro cálido despierta
en la frialdad de su invernal esfera gemela;
hechizo simultáneo de resurrección taciturna
se eleva la hora de la cena
Rostro-espejo comprensivo para el lánguido y hambriento
susceptible al café humeante,
un toque chorreante para el adicto a la vía láctea flotante…
Miraba enamorada el punto concéntrico.
Seducida por el jugo de plata
eclipsé mis pupilas,
inhalando el sueño lucido
que me obsequió el desvelo.
III
Soy yo, luego ya no;
amante de las tinieblas
lunar en la piel del cielo;
en la espectral sombra del gato negro me contemplo…
Huraña, sola,
con las pupilas amarillas y desnudas creciendo.
Soy la esfinge de la luna
y la risa del escéptico,
el horror del supersticioso
y el prisma diáfano negruzco del viento.
Alejandrina Rodríguez González
Preparatoria 5