Catarsis

Acércate a mí, linda avecilla
No temas a mis manos
Mi boca o gritos
Que con ardor te suplican

Entierra en estos, mis ojos,
Tus garras cual presa viva
Arráncalos de sus fosas,
Del lecho que los cautiva

Sujétalos entre tus patas,
Y vuela cuán lejos puedas
Al fin sabrán de alegría,
De libertad y belleza

Deja que la calma los acaricie,
Los cobije y apapache
Permítete llevarles
Al horizonte que no pude mostrarles

Entonces cobra tu acto,
Tirándolos entre la mugre
Que exploren también la agonía,
dolor y desolación.

Arderán cual rojo fuego
Llenándose de hojarasca
El gozo han de pagarte
Con muy dolorosas lágrimas.

Sosiega tu sed con su llanto,
Hasta que no quede gota,
Ni rastro por muy escaso,
Del líquido derramado

Tómalos bajo tus alas,
Y emprende el retorno,
Tráelos de vuelta a casa,
Pónmelos donde me faltan.

No habrá, avecita linda,
Más llanto sobre esta cara
Podrás dejar de cantarme
Para alegrar mi mañana

Pues ya no habrá de esos días,
Ni tristes ni desolados,
Pues los manantiales
Para mí ya se han secado.

Valeria de la Torre Solís
Escuela Preparatoria Regional de Huejuquilla El Alto, módulo Mezquitic

Atardecer. Valeria Venegas Sandoval. Preparatoria 14

Atardecer. Valeria Venegas Sandoval. Preparatoria 14