3
El hombre de saco y sombrero dejó de ser él y se extinguió al dejarse caer de aquel largo edificio.
 
2
Me acerqué al colorido de la calle central. Fue maravilloso el recorrido, subí hasta la orilla y por fin entendí mi lugar.
 
1
Hoy desperté con ganas de no ser nadie en este mundo. Tomé mi sombrero de gala con mi traje de charro y salí en busca de otro lugar para existir como alguien nuevo.
 
Cero 

Juliana Belén Villafaña Silva
Preparatoria 9

Amor destinado | María Luisa Rivera Garrido. Preparatoria Regional de El Salto